Hidrogeno Verde

Debería suponer entre 70 y 125 millones de toneladas en 2030 cuando apenas llega hoy a 0,7 toneladas. La AIE critica la falta de avances energéticas contra el cambio climático.

La producción de hidrógeno verde, producido con fuentes renovables y por tanto sin emisiones de CO2, tendría que multiplicarse por más de 100 entre 2022 y 2030 para estar en línea con los objetivos internacionales de limitación del calentamiento global.

Así lo estima la Agencia Internacional de la Energía en un informe publicado hoy sobre seis principales sectores responsables de las emisiones de gases de efecto invernadero, en el que se recuerda que en 2030 será necesaria una capacidad de generación renovable de 11 teravatios por los menos de 4 que hay operativos actualmente.

El hidrógeno renovable representó 0,7 millones de toneladas el año pasado, cuando en 2030 debería suponer entre 70 y 125 millones de toneladas, según la AIE. Apenas cubre el 1% de la prodcción total de hidrógeno cuando en 2030 debería de representar el 50%.

A su vez, la intensidad en términos de emisiones de la producción de hidrógeno (los kilos de dióxido de carbono por tonelada de H2) tendría que disminuir en cerca del 50% para comienzos de la próxima década.

Eso habría de traducirse en un recorte global del 10% de las emisiones de CO2 con una clara preponderancia del hidrógeno renovable o bajo en carbono, cuando en la actualidad más del 90% de la producción se hace a partir de combustibles fósiles.

Los autores del estudio indican que se deben reforzar las señales para la demanda de hidrógeno renovable y bajo en carbono, tanto de los compradores públicos como privados, y eso significa pasar de los compromisos a los contratos y las políticas.

El documento constata que «los actuales esfuerzos se mantienen lejos del potencial de explotación total de la colaboración internacional para acelerar las transiciones».

Una de las evoluciones positivas que señalan es el tirón en las ventas de vehículos eléctricos de pasajeros, que ahora suponen un 14% del total en el mundo, unn porcentaje que se viene duplicando cada 1,2 años.

Otra es el despliegue de energías renovables, que el pasado año supusieron el 83% de las nuevas capacidades de generación de electricidad. De hecho, el informe destaca que las energías renovables suponen más del 50% de la generación eléctrica en un 30% de los países.

No obstante, la electricidad supone el 23% del total de las emisiones de gases de efecto invernadero y han aumentado en torno al 10% desde 2010. Según la AIE, deberían disminuir un 50% para 2030 para estar en línea con la meta de cero emisiones netas para 2050 con las que imitar el calentamiento global a 1,5 grados centígrados.

Fuente: La Razón

Hoy en día existe un boom de implantación de proyectos renovables, principalmente fotovoltaica. Y dicha implantación inserta más potencia añadida no controlable y hace que cada día haya más curtailments.

¿Que es un curtailment? Es cuando en un nodo concreto de la Red eléctrica se tiene que parar un generador eólico o parque fotovoltaico haciendo sol y viento, proque o bien ese nodo de la Red no puede soportar más carga o porque no hay consumo suficiente.

Y esque estamos en la zona fácil de la implantación renovable, cuando las renovables disfrutan de sus bajos costes directos y se aprovecha de la estabilidad de Red que aportan otras tecnologías no renovables. Pero ese es un camino de corto recorrido… Ya que si seguimos implementando renovables sin gestión alguna de la energía a nivel almacenamiento o ampliaciones de la misma, simplemente caminamos contra un muro a toda velocidad.

¿Y porque pasa esto? ¿Porque nadie se pone manos a la obra? Porque eso implicaría asumir que las renovables no son baratas y que alguien tiene que pagar todos los costes indirectos de gestionar esa energía para hacer una Red estable. Principalmente ampliaciones de la Red y sistemas de almacenamiento que no son rentables por si solos. Además de sistemas que transmitan energía de la Red hacia consumos no eléctricos, como el hidrogeno. Recordar que sólo el 20% de los consumos son eléctricos.

Y aquí estamos, corriendo como locos para coger una parte del pastel fotovoltaico, ultra rentable a día de hoy pero, no tanto a largo plazo por la propia canibalización de las renovables a si mismas que se traducirá en inestabilidad de precios en la Red y mas curtailments ¿Será la energía muy barata? Será gratis cuando haya sol y viento y carisma cuando no lo haya. Lo cual hará que la rentabilidad de los proyectos renovables caiga al suelo. A no ser que hagamos algo y tomemos conciencia de los sobre costes de las renovables y veamos quién los tiene que pagar y como.

El hidrógeno es un buen ejemplo, actualmente es más costoso que el mercado, pero a su vez todos los promotores fotovoltaicos lo miran como la solución a sus curtailments y falta de capacidad de Red. Ahora bien nadie quiere pagar el sobre coste de la tecnología. Todo el mundo quier vender energía cusndo hay sol y nadie preocuparse de asumir los costes de mantener suministro cuando no lo hay.

Es un tema complejo que probablemente se resolverá en momentos burbuja que el actual y más calmados, a base de legislación que de un marcó a todas las tecnologías que permiten una Red estable con alta implantación de renovables. ¿Quien lo pagará? Las renovables que son las causantes, pero en última instancia lo pagarán los consumidores a los que se repercutirá todo ese sobrecoste.